En esta sesión dinámica, la Diputación de Barcelona, representada por Xesco Gomar y Albert Vendrell Roca, presentó su proyecto Renovables 2030. Su objetivo es subvencionar la implantación de energías renovables y comunidades energéticas en los municipios de Barcelona, previendo una inversión de 70 M€ para acelerar la transición energética. A continuación, siete beneficiarios explicaron qué retos habían abordado apoyados por el plan de Renovables 2030.
Primeramente, se abordó el reto “¿Cómo conseguir que los costes de la eficiencia energética puedan autofinanciarse por sí mismos mediante economías de escala? El caso de la Agencia Local de Energía de Osona (ALEO).” El representante de ALEO, Gil Silvans Muns no pudo asistir, pero Albert Vendrell Roca presentó la labor de la agencia. Su estrategia principal consiste en promover el ahorro y la eficiencia en el uso de la energía antes de empezar a invertir en energías renovables. A través del apoyo en la contabilidad y la tele gestión ayudan a los municipios a disminuir los costes energéticos.
Después, Ramón Roig Solé (Balenyà Sostenible SCCL) discutió el reto “¿Cómo cumplir los objetivos de reducción de emisiones cuando el ente local solo es responsable del 7% de éstas y necesita implicar a la ciudadanía? El caso de las comunidades energéticas en la ciudadanía”. Su presentación fue una amena guía paso a paso de como habían establecido una comunidad energética de consumo compartido en Balenyà. La comunidad incluye una cooperativa de 2º grado, Osona Energía SCCL, que apoya a las cooperativas de 1er grado en cuestiones como la gestión contable, los impuestos, la revisión de instalaciones…Desde los inicios en julio de 2021, hasta noviembre 2022 han conseguido llegar al 15% de los hogares de Balenyá. Con una inversión inicial de menos de 9000€ han logrado una financiación de 532.000€ y ya han comenzado con las primeras instalaciones fotovoltaicas.
A continuación, Lluís Gibert Fortuny y Jordi Payà Rovira, ambos del Ayuntamiento de Mataró, presentaron el reto “¿Cómo aprovechar los excedentes de producción renovable para impulsar la lucha contra la pobreza energética más allá de la cultura de la subvención? El caso de la comunidad energética del polideportivo del municipio de Mataró”. A través de la instalación de placas fotovoltaicas en la cubierta del polideportivo municipal, el ayuntamiento ayudará a reducir la factura eléctrica de familias en situación de pobreza energética además de cubrir el consumo de los edificios públicos. De esta manera se aúnan las soluciones a retos ambientales y sociales.
El reto “¿Cómo encajar los modelos jurídicos necesarios para la transición energética en la normativa del sector público?” fue presentado por Jorge Andrey Sterner (Bufete Schlaich-Dauss). Jorge enfatizó que el miedo provocado por el desconocimiento del principio de legalidad por parte de quienes toman las decisiones dentro de las administraciones públicas puede ser un freno al desarrollo de nuevas iniciativas que impulsen la transición energética. Por ello, aclaró la legislación al respecto y recalcó que el principio de legalidad incluye el concepto de eficacia, es decir, promueve la acción. Por tanto, en la actual situación de emergencia climática, aprobar proyectos innovadores encaminados a la sostenibilidad energética es una apuesta segura.
Montserrat Ambròs Fuentes (Associació d'Empresaris del Polígon Bufalvent) abordó el reto “¿Cómo implicar a la industria en el reto climático y, a su vez, ofrecerles ventajas competitivas que atraigan su implantación en el municipio? El caso del polígono industrial de Bufalvent (Manresa).” En su presentación, Monserrat señaló como la Associació d'Empresaris del Polígon Bufalvent ha promovido la creación de una comunidad energética en el polígono, “Manresa Ilumina”. El plan estratégico incluye instalaciones fotovoltaicas para el autoconsumo, una pequeña central eólica y una red de calor por biomasa. Se prevé que las empresas tendrán ahorros energéticos desde el primer año de implantación, que para la instalación fotovoltaica será 2023.
Dos representantes del Ayuntamiento de Sant Antoni de Vilamajor, Raúl Valentín i del Valle y Joaquin Vergés Montasell, hablaron del reto “¿Cómo compaginar la necesidad de producción de energía renovable con las ubicaciones disponibles sin poner en riesgo valores paisajísticos o de producción alimentaria? El caso del agrovoltaico de Sant Antoni de Vilamajor”. El proyecto se centra en hacer compatible el cultivo de secano con la instalación de fotovoltaicas, un proyecto innovador que apunta a ser un referente. Estando en las fases iniciales, el proyecto se enfrenta al desafío de encontrar una disposición de las instalaciones en las que se maximice la superficie cultivable y se permitan los trabajos agrícolas con maquinaria.
Finalmente, Elisabeth Contreras Quesada (ZinCo Cubiertas Ecológicas SL) presentó el reto: “Cuando todo indica que no llegaremos a tiempo tan solo con la mitigación, ¿cómo nos adaptamos al cambio climático sin, a su vez, gastar energía que produzca más emisiones? La oportunidad de las cubiertas verdes.” Elisabeth explicó los beneficios de compatibilizar las cubiertas verdes con las instalaciones fotovoltaicas. Las cubiertas verdes atraen biodiversidad, recogen agua que puede reciclarse y regulan la temperatura. Además, como Elisabeth apuntó, numerosos estudios muestran que las placas fotovoltaicas son más eficientes en presencia de cubierta verde gracias a la capacidad de estas para mantener la instalación dentro de su rango óptimo de temperaturas de funcionamiento.
Los proyectos presentados fueron un inspirador e instructivo ejemplo de cómo ayuntamientos, empresas y particulares pueden actuar para acelerar la transición energética.
Laura Martínez Íñigo
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23/11/2022