Durante la sesión se abordaron diversos temas relacionados con la calidad del aire y la contaminación atmosférica en las ciudades españolas.
El confinamiento producido por la pandemia ofreció un escenario insólito y excepcional para poder estudiar y evaluar cómo afecta la movilidad a la calidad del aire.
El primer bloque de la sesión, introducida por Patricia Cervigón, trató sobre la calidad del aire como impulsor económico y social. Primero, Juan Bárcena (Ecologistas en Acción), expuso los efectos del confinamiento en la movilidad y, a su vez, su incidencia en la contaminación atmosférica. En el informe de Ecologistas en Acción se recoge la comparación en varias ciudades españolas de los valores del NO2 durante el periodo 14/03-31/10 comparados con la media del 2010-2019, con el resultado de una reducción total del 52% durante el Estado de Alarma y una reducción total durante el periodo estudio del 42%.
Por su parte, Íñigo Arrizabalaga (GEOPLAT) habló acerca de las Mejores Técnicas Disponibles entre los sistemas de producción de calor y frío. Gracias a los sistemas de geotermia se puede alcanzar un ahorro de energía del 46% y reducir emisiones de CO2 en un 60%.
Javier Vico (UGT) expuso que es necesario el empleo verde para una transición justa. “Las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) no necesariamente van a quitar empleo”. De hecho, según afirmó, sectores como hostelería y turismo pueden verse beneficiados, así como servicios de bicicletas y patinetes, el carsharing, mayor personal en trenes, metro, etc. También pueden crear empleo las inversiones que se realicen en ampliar aceras, parques, el seguimiento técnico de las ZBE, etc.
Seguidamente, Emilio Ortega (UPM) explicó los resultados del estudio sobre los efectos de la configuración urbana sobre la movilidad a pie y la contaminación en las ciudades. Uno de los objetivos era conocer la concentración de PM2,5 en un conjunto de calles de Madrid mediante el uso de sensores móviles, con un recorrido dentro y fuera de Madrid Central de 17,2 km. Se obtuvo el resultado de que no hubo diferencias en cuanto a concentraciones promedio de las zonas de dentro y fuera de Madrid Central. Otro de los objetivos era estudiar el grado de disminución de emisiones de CO, NOx y PM dentro de Madrid Central a través de diferentes escenarios (mayor o menor peatonalización y mayor o menor reducción del tráfico). Se obtuvo el resultado llamativo de que una mayor peatonalización manteniendo el mismo volumen de vehículos existente en la realidad (mismo número de viajes) puede traer problemas de congestión puntual en algunas zonas, puesto que al existir menos espacio disponible pueden llegar a colapsar. Por tanto, la peatonalización de dichas zonas urbanas hay que diseñarla “con cabeza”.
La segunda parte de la sesión se centró en las ZBE. La inició Rafael Borge (UPM), quien expuso las directrices para llevar a cabo un correcto diseño y seguimiento de las ZBE. En cuanto al diseño, es importante caracterizar el parque circulante de vehículos y realizar un análisis de la contribución de las fuentes contaminantes, con modelos del aire. En cuanto al seguimiento, es necesario establecer indicadores de calidad del aire que permitan aislar el efecto de lo que se quiere conseguir, obteniendo los datos a partir de sensores o muestreadores pasivos. “Las ZBE son una oportunidad de interpretar la normativa y adaptarla a las necesidades concretas de cada municipio, y alinearlo con otras estrategias de calidad del aire/cambio climático local o regional”, concluyó.
Joan María Bigas (AMB) mostró el funcionamiento de la ZBE del Área Metropolitana de Barcelona. Según la OMS, la contaminación del aire se ha convertido en el mayor riesgo para la salud ambiental, y en el AMB se superan cada año los límites de concentración en la media anual de NO2. Hechos como este hicieron que el AMB se convirtiera en la primera ZBE de España y la más grande del sur de Europa (95 km2): en las rondas se puede circular sin restricciones, pero dentro de ellas no. Adicionalmente, se están desarrollando ZBE en paralelo en Sant Cugat del Vallès y Sant Joan Despí, de iguales características. Los primeros resultados de la ZBE son una reducción de los vehículos sin etiqueta del 20% (marzo 2017) al 3% (abril 2021), y una reducción de vehículos sancionables por la ZBE del 8% (noviembre 2019) al 1% (abril 2021).
Por último, tuvo lugar un debate con representantes municipales y de la DGT moderado por Jaime Gil, cerrando la sesión un coloquio con el público. Intervinieron en él Alba Gordó (Ayto. San Cugat del Vallès), Xosé Manuel Tato (Concello de Pontevedra), Manuel Aurelio Martín (Ayto. Gijón) y Susana Gómez (DGT), quienes presentaron las iniciativas llevadas a cabo en sus respectivos municipios sobre la mejora de la calidad del aire, así como la visión de la DGT al respecto, que a su vez presentó la señalización común en todo el territorio español para indicar que se está circulando por ZBE.
Alejandro González Iñarra [www.linkedin.com/in/aleinarra]
03/06/2021