Lamentablemente un año más la pobreza energética se manifiesta en muchos hogares y no podemos decir, ni en nuestro país ni en Europa, que haya desaparecido. Aunque cada vez se avanza más en el desarrollo de iniciativas y proyectos para paliar y dar solución a esta problemática, la realidad de muchas familias es que tiene que seguir haciendo un ejercicio de ingeniería financiera cada mes para acertar cómo repartir sus ingresos entre servicios tan básicos como la alimentación, el agua o la energía doméstica, entre otros.
La pobreza energética se manifiesta de muchos modos; no sólo la sufren aquellos hogares con ingresos limitados que destinan un alto porcentaje de sus ingresos para poder pagar las facturas. También se da, por ejemplo, en aquéllos que reducen tanto su consumo que lo hacen a costa de vivir en unas condiciones inadecuadas (falta de climatización, mala alimentación, falta de higiene…) con consecuencias sobre su salud física y mental; en aquellos que incurren en retrasos en el pago o en el propio impago de las facturas, o aquellos que no pueden calentar de forma adecuada sus hogares, es decir, que declaran pasar frío en invierno.
Con los datos del tercer estudio de ACA sobre la materia ‘Pobreza, vulnerabilidad y desiguadad energética. Nuevos enfoques de análisis’, que será actualizado con la publicación de un nuevo informe en el primer cuatrimestre de 2018, el 11% de los hogares (más de 5 millones de personas) en España se declaraba incapaz de mantener su vivienda a una temperatura adecuada durante la estación fría y el 8% aseguraba haber tenido retrasos en el pago de las facturas debido a dificultades económicas. Dos datos que evidencian algunas de las formas por las que se puede inferir que un hogar se encuentra en situación de pobreza energética y que ponen de manifiesto que el problema está aún lejos de haberse solucionado.
A pesar de ello en el último año se han seguido realizando avances a escalas muy diferentes. Por un lado, en España debe destacarse la aprobación de un nuevo bono social eléctrico que ha mejorado sustancialmente en algunos aspectos, en especial respecto a los derechos del consumidor y la introducción de criterios de renta en la mayor parte de las categorías de asignación, atendiendo así a las recomendaciones y análisis que por parte de ACA llevamos realizando desde el primer informe de la Pobreza Energética en España, de 2012. Por otro lado, a nivel europeo, es destacable la puesta en marcha del recién presentado Observatorio Europeo de la Pobreza Energética (EPOV), un proyecto que permitirá realizar un seguimiento del estado de esta problemática en toda Europa, compartiendo experiencias y conocimiento entre países y expertos.
Por todo ello, un año más, tenemos que seguir poniendo de manifiesto la existencia de este problema y para ello convocamos y nos sumamos la Semana Europea de la Pobreza Energética que se desarrollará del 17 al 22 de febrero con el objetivo de seguir generando espacios de debate a diferentes escalas geográficas, que permitan seguir trabajando en soluciones, generar redes e impulsar iniciativas que fomenten el análisis, la comunicación y la acción frente a este problema social que debe erradicarse
Que solo tengamos que poner velas para adornar nuestra vida
¿Qué os proponemos? Iniciativa #nomaspobrezaenergetica
En esta Semana Europea de la Pobreza Energética 2018 os animamos desde ACA a reivindicar las soluciones necesarias para evitar la pobreza energética y dar a conocer las dificultades que sufren los hogares que se encuentran en esta situación compartiendo en redes sociales una foto de tu ventana junto con una vela y el hashtag #nomaspobrezaenergetica acompañando a tu mensaje.
Es una acción muy sencilla pero pretendemos que sirva para hacer de altavoz del problema, dar a conocer las soluciones puestas en marcha y/o las propuestas para mitigar o prevenir la pobreza energética. La vela simboliza las estrategias y los esfuerzos que realizan muchas personas para poder iluminarse al menor coste posible, pero también la llama es la esperanza de reclamar con soluciones y propuestas el fin de la pobreza energética.
¡Os animamos a participar!
¿Por qué la semana del 17 al 22 de febrero?
La celebración de la semana de la lucha contra la pobreza energética, conmemora la tercera (del 17 al 22 de febrero de 1956) y última de las extraordinarias oleadas de frío que recorrieron Europa en febrero de 1956. Durante ese mes, nuestro continente soportó unas heladas excepcionales y un frío intenso durante casi un mes, completando el invierno más duro en Europa y España desde que existen registros.
Sigue nuestras actividades durante la Semana Europea de la Pobreza energética que iremos anunciando en las redes sociales y accede a otros contenidos sobre la pobreza energética…
- Solicita nuestros estudios sobre la pobreza energética
- Forma parte de la Red PICE (Puntos de Información al Consumidor Energético)
- Infografía sobre el bono social eléctrico
- Análisis del nuevo bono social eléctrico
- Infografía Salud, edificios y pobreza energética
- Ayúdanos con nuestro Crowdfunding frente a la pobreza energética
- Razones para apoyarnos en nuestro 4º estudio de la pobreza energética en España